Muri, la nube-medusa más alegre, flota sobre la playa al atardecer. Sus tentáculos brillan como pequeños arcoíris. ¡Qué emoción! Hoy busca conchas para su colección. Una concha rosa, dos conchas azules, ¡y tres conchas doradas! Las olas hacen shhh, shhh, y Muri sonríe. Su favorita es una concha súper-brillante, casi como una pequeña estrella en su manita de nube.
3-4 años
⏱️ 3 min
Muri y la Concha Brillante
Pedir ayuda nos trae de vuelta la alegría.
Muri, la nube-medusa más alegre, flota sobre la playa al atardecer. Sus tentáculos brillan como pequeños arcoíris. ¡Qué emoción! Hoy busca conchas para su colección. Una concha rosa, dos conchas azules, ¡y tres conchas doradas! Las olas hacen shhh, shhh, y Muri sonríe. Su favorita es una concha súper-brillante, casi como una pequeña estrella en su manita de nube.
De repente, una ola juguetona hace ¡Splash! Muri se distrae, ¡le encantan las burbujas! Mira las burbujas, olvida su concha súper-brillante. ¡Oh, no! ¿Dónde está? Muri busca con su manita de nube. Busca uno, busca dos, busca tres veces. Pero la concha no está. Sus ojitos curiosos se ponen un poquito tristes, como dos gotas de rocío. Ve a Cangrejo Rosado y a Estrellita de Mar cerca de una roca.
De repente, una ola juguetona hace ¡Splash! Muri se distrae, ¡le encantan las burbujas! Mira las burbujas, olvida su concha súper-brillante. ¡Oh, no! ¿Dónde está? Muri busca con su manita de nube. Busca uno, busca dos, busca tres veces. Pero la concha no está. Sus ojitos curiosos se ponen un poquito tristes, como dos gotas de rocío. Ve a Cangrejo Rosado y a Estrellita de Mar cerca de una roca.
Muri respira hondo. Piensa: “¡Necesito ayuda!” Se acerca despacito a sus amigos.
—Hola, Cangrejo Rosado y Estrellita de Mar —dice Muri, con voz suave—. ¿Podéis ayudarme? He perdido mi concha brillante.
Cangrejo Rosado y Estrellita de Mar, ¡sus dos nuevos amigos!, sonríen. Juntos, miran entre la arena. ¡Plin! Allí está la concha, brillando como un tesoro. Muri abraza a sus amigos, ¡qué alegría! El cielo es naranja y morado, como un sueño dulce. Muri, feliz, vuelve a poner sus conchas en su colección, uno, dos, tres y la súper-brillante. ¡Qué bien se siente pedir ayuda!
Muri respira hondo. Piensa: “¡Necesito ayuda!” Se acerca despacito a sus amigos.
—Hola, Cangrejo Rosado y Estrellita de Mar —dice Muri, con voz suave—. ¿Podéis ayudarme? He perdido mi concha brillante.
Cangrejo Rosado y Estrellita de Mar, ¡sus dos nuevos amigos!, sonríen. Juntos, miran entre la arena. ¡Plin! Allí está la concha, brillando como un tesoro. Muri abraza a sus amigos, ¡qué alegría! El cielo es naranja y morado, como un sueño dulce. Muri, feliz, vuelve a poner sus conchas en su colección, uno, dos, tres y la súper-brillante. ¡Qué bien se siente pedir ayuda!
