En una noche víspera de Halloween, el Profesor Calabacín, un calabacín muy sabio con gafas redondas y gruesas, estaba en su laboratorio de cocina. ¡Qué emoción! Preparaba su famosa 'Poción de Risas' para la gran fiesta de disfraces. De repente, una cosquilla le hizo decir: '¡Achís!'. Fue un estornudo tan, tan gigante que lo hizo volar por los aires y desparramó todos los ingredientes secretos por la casa. ¡Oh, no! Tenía que recuperarlos antes de la medianoche, antes de que el último murciélago de juguete se fuera a dormir.