Centavito Veloz, una moneda de cinco centavos, vivía en un monedero de cuero suave. Era brillante y redondito, pero se sentía un poco aburrido. Mientras los días se hacían más cortos y el aire olía a hojas secas, Centavito soñaba con rodar lejos, más allá de ese oscuro bolsillo. Imaginaba aventuras en la víspera de Halloween, donde cada giro sería un nuevo descubrimiento, y su brillo ayudaría a encontrar caminos secretos. ¡Anhelaba una emoción que lo sacara de su escondite!