Yo soy una motita de polvo, ¡la más observadora del estante! Cada mañana, Brochita Limpiadora se despierta. Ella es un cepillito con cerdas suaves, muy suaves, con un lacito rojo y ojitos curiosos. ¡Puf! Brochita bosteza y se estira. —¡Ay, ay, ay, qué empolvado estoy! —dice con voz chiquitita, aunque solo está en el estante. Pero hoy no es un día cualquiera. Hoy Brochita va a limpiar. ¡Zas! Se desliza hacia el libro más grande, un libro viejo y con telarañas. ¿Qué hará Brochita? ¿Será valiente?