En el corazón del bosque, donde los helechos dormían y los arroyos susurraban, vivía Búho Plumerito. Él era el más suave y silencioso de todos, tan especial que su canto apenas era un aliento, una melodía tan tenue que casi se perdía en la brisa.
Descubriendo la magia en la voz más suave
Cuentos relacionados que te pueden gustar.